Es posible que alguna vez hayas admirado a alguien cercano por su capacidad para tomar decisiones, gestionar grupos, discrepar y/o poner límites en sus relaciones. ¿Qué hacen esas personas?
Hoy os hablamos de uno de los temas, probablemente, más habituales de consulta: los Derechos Asertivos.
En primer lugar, la asertividad es una habilidad social, lo cual quiere decir que es algo aprendido y entrenable. Influye en gran medida el proceso de socialización que he tenido en la niñez y la juventud y en función de ello, tendré desarrolladas en mayor o menor medida diferentes capacidades para interaccionar con otras personas.
La función principal de la asertividad es poder expresar nuestros sentimientos y emociones, opinar y rebatir sin sentirnos mal o generar tensión o poner límites a otras personas y a uno mismo.
Como estarás pensando, realmente implica muchas habilidades distintas; regulación emocional para no “explotar” o inhibirse, saber escoger las palabras y cómo expresar mis ideas y sentimientos, etc.
Paso a paso, lo primero es conocer cuáles son nuestros derechos asertivos para poder recurrir a ellos y comenzar a entrenar nuestra habilidad social.
¿Qué son los derechos asertivos?
Son una serie de principios que todos podemos ejercer por el hecho de ser personas, de existir.
Son válidos para mí pero también para las personas con quienes interaccionamos. Por ende, es fundamental saberlos expresar manteniendo un enfoque de respeto hacia la otra persona en todo momento.
Determinan aquello que es importante para mí y me permite defender mis necesidades. En general, cuando somos capaces de ejercitarlos, generamos una buena autoestima ya que nos empoderamos y tomamos conciencia de ser capaces de dirigirnos por nosotros mismos ante la tensión y discrepancias.
Os facilitamos una lista con 22 derechos asertivos, ¿Cuáles se te dan mejor y cuáles peor?
- Algunas veces, tienes derecho a ser el primero. Ceder siempre a los demás, no comunicar tus deseos o preferencias no te hace más cortés. No digas “lo que quieras” cuando tengas una preferencia.
- Tienes derecho a cometer errores. Los errores forman parte de la vida, son necesarios para el aprendizaje. No te avergüences por ellos y defiende tu derecho a cometerlos.
- Tienes derecho a tener tus propias opiniones y creencias. Tener una opinión distinta a la mayoritaria no implica estar equivocado. Eres libre de pensar, creer y opinar lo que sientas.
- Tienes derecho a cambiar de idea, opinión, o actuación. Cambiar de opinión no es una traición a ti mismo, es evolucionar, aprender, ser flexible.
- Tienes derecho a expresar críticas y a protestar por un trato injusto, pero siempre de forma respetuosa a los demás.
- Tienes derecho a intentar cambiar lo que no te satisface. No te digas a ti mismo que no lo has intentado.
- Tienes derecho a pedir ayuda o apoyo emocional.
- Tienes derecho a sentir y expresar el dolor. Todos sentimos dolor, y tienes derecho a expresarlo ante aquellas personas que son importantes para ti si lo necesitas.
- Tienes derecho a ignorar los consejos de los demás. Cuando alguien te da un consejo es precisamente eso, no una orden de actuación.
- Tienes derecho a recibir el reconocimiento por un trabajo bien hecho. Esto se aplica a los demás, pero sobre todo a ti mismo. Reconoce tus méritos.
- Tienes derecho a negarte a una petición, a decir “NO” sin sentirte culpable o egoísta. Decir “no” no te hace desleal o egoísta.
- Tienes derecho a estar sólo, aún cuando los demás deseen tu compañía.
- Tienes derecho a no justificarte ante los demás. En ocasiones con un “No, gracias” es suficiente. No tienes por qué dar excusas y menos si no son sinceras.
- Tienes derecho a no responsabilizarte de los problemas de los demás.
- Tienes derecho a equivocarte y contradecirte, ¿alguien no lo ha hecho alguna vez? ¡Es normal!
- Tienes derecho a ser tratado con dignidad. Cuando sientes que no eres tratado con la dignidad y el respeto que mereces, tienes derecho a protestar por ello.
- Tienes derecho a tener tus propias necesidades y que sean tan importantes como las de los demás.
- Tienes derecho a experimentar y expresar tus propios sentimientos, así como a ser su único juez.
- Tienes derecho a pedir lo que quieres y la aceptar un no por respuesta.
- Tienes derecho a hacer menos de lo que eres capaz de hacer. No siempre puedes rendir al máximo.
- Tienes derecho a decidir qué hacer con tu cuerpo, tiempo, y propiedad.
Algunas referencias:
Olga Castanyer Mayer-Spiess, La asertividad: expresión de una sana autoestima
¿Qué dice la RAE que es ser asertivo?
Asertividad: https://es.wikipedia.org/wiki/Asertividad
Derechos que practican las personas asertivas
Terapia presencial y online.
C/ Príncipe de Vergara, 207, Portal 3, Bajo 5. CP: 28002, Madrid.